Kms Total: 1021,78
Tiempo Mov: 5h 38min
Tiempo Parado: 3h 26min
Vel Max: 48,3
Media Mov: 12,3
Media Total: 7,6
El frio nos acompaña a Santiago.
A las 0820 nos montabamos en la bicicletas con la prisa de hacer los kilometros que nos faltaban de la etapa de ayer. Saliamos sin apenas mirar las bicis. Ya no nos preocupa si estan engrasadas, ni si suena algun ruido. La verdad es que estan un poco perjudicadas. La mia apenas frena, me he comido las pastillas en el viaje. La de Sam canta la traviata. Espero que aguante para mañana porque en las bajadas me da un poco de respeto. No me gustaria caerme antes de llegar a Santiago.
El dia se ha levantado con mucho aire. Aire frio. Nos hemos ataviado con manguitos y chubasquero que no nos hemos quitado durante toda la jornada. El terreno se empinaba y se volvia exigente nada mas salir, optando por la variante originaria y prescindiendo de pasar por Oseira, hasta Castro Dozon. Dios que rampas. Ya no tenemos las rodillas ni las piernas para muchos trotes (Juan Diego si, es de otro planeta). El frio apretaba. Y al sudar nos quedaba todo empapado por dentro por no traspirar. Durante la mañana el frio incluso nos congelaba las ganas de hablar. Circulabamos como almas en pena, en silencio, todos pensando en lo que nos ha aportado este viaje. En Castro Dozon nos parabamos a sellar y a tomarnos un cafe calentito, para poder afrontar el resto de la jornada. A partir de ahi ya empezabamos a hablar. Era eso, el frio. De ahi hasta Laxe, donde llegamos cansados sobre las 12, hambrientos. Ya por entonces habiamos decidido no acabar en Santiago hoy. No valia la pena. No, porque hubiesemos llegado muy tarde y demasiado cansados, si ganas de disfrutar. Sin estres hemos parado en Silleda a comer un menu que nos ha reconfortado. Restaurante Bon Xato, al pie del camino. Menu y precio correcto. Como teniamos tiempo hemos parado en un ciber para poder preparar los partidos de hattrick y ver las posibilidades de vuelta en bus. Hubiera preferido una buena siesta pero ya no tenemos ni esterilla. A partir de Silleda el terreno se volvia un poco mas amable y bonito, si bien alguna rampa nos quitaba el sentido. Durante el dia de hoy hemos visto mas patigrinos que en todo el camino. Muchos. Menos que por el frances, imagino. Todos olemos Santiago. El Toro Rosso de Sam iba alto de vueltas, pero aun sin reservarse ya nada, se comportaba. Esta fuerte, aunque la dureza del Camino tambien le ha sorprendido. Como a todos. Nos duele todo pero tenemos mucha ilusion por llegar, eso es el analgesico, el calmante. Despues de pasar de largo A Bandeira nuestras posibilidades de encontrar alojamiento se limitaban a Ponte Ulla. De hecho, en Silleda hemos llamado a una casa rural de Ponte, y nos ha dicho dicho el hombre que tenia completo. Teniamos un poco de miedo. Igual nos quedabamos sin alojamiento. Pero como siempre desde que iniciamos el Camino en Sevilla, no nos preocupaba. Algo encontrariamos. Al llegar a las primeras bajadas de Ponte Ulla, pueblo enclavado entre dos montañas, nos hemos encontrado con la romeria encabezada por el cura Blas, de Fuenterroble de Salvatierra. Aun recuerdo cuando pasamos por su albergue suplicando un cafe caliente y la actividad frenetica preparando toda la peregrinacion que empezaria dias mas tarde. Por aquel entonces fue cuando descubrimos lo que suponia el frio en el camino. Lo pasamos fatal. Con burros y carros y unas 200 personas salieron desde Orense hasta Santiago. Hemos coincidido con gente que vimos en el albergue, preparandose para su camino. Que curioso. Nuestros caminos se han vuelto a cruzar casi 500 km mas tarde. Son esas cosas del camino que te sorprenden. Que pasan y no sabes por que razon. Y se acordaban de nosotros...
En Ponte Ulla tocaba la tarea de encontrar sitio para dormir. A una mala nos dejaban dormir en el polideportivo con los romeros de Blas. Pero mi miedo a despertar a tanto peregrino cansado por mis ronquidos me ha hecho declinar la oferta. Entonces ha aparecido la chispa del camino y en un bar donde no parecia que hubiese vida nos han ofrecido habitacion por 15 eur/persona (O Churrasco de Juanito), asi que para dentro. Duchita y llamadita a mi niña. Que ganas de verlas, a ella y a la barrufeta. Ya falta nada. Os quiero princesitas. Mañana nos queda lo mejor, disfrutar los ultimos 20km y ver Santiago desde lo alto. Ver pasar todo el camino por la mente, con las cosas buenas y malas, y dejar que nuestro vello se ponga de punta. Disfrutar, al fin y al cabo. Toca disfrutar...
Gracias por los animos. De verdad.
Un abrazo.
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